Música: P. Donostia
Coreografía: V. Olaeta
zozo

Ballet humorístico, propicio al mimetismo, basado en la música popular. En él aparece un muchacho, un espantapájaros y un mirlo. El muchacho se hace amigo del "mirlo" y le obsequia con un trozo de "talo" (pan de borona), pero el “mirlo” le da tal picotazo en la mano que, enfurecido el chico por el dolor, que le causa, le da fin al pobre animalito.